Siempre que haya dudas hasta el último momento a la hora de elegir la mascota, también existe la opción de combinar dos o más especies, aunque tendrás que informarte previamente sobre la compatibilidad entre ambas para evitar sustos y situaciones indeseadas.
El origen de la palabra jinete proviene del nombre de una agrupación de tribus bereberes norteafricanas, los Zanāta, elogiados en la edad media por todo el occidente islámico como criadores de caballos y expertos en equitación, y eran contratados por reyes como tropas de caballería, pero otras fuentes exponen que en sus inicios esta palabra estaba relacionada a la monta de camellos o dromedarios y luego se desplazó hacia los caballos. Pero en la actualidad se le llama jinete al individuo que monta a caballo y es experto en equitación, que es la habilidad o destreza para montar un caballo con determinación y precisión, ya sea con una finalidad recreativa, de trabajo y hasta curativas, y al referirse a lo recreativo se habla del deporte que consiste en entrenar al caballo para saltar una serie de obstáculos en un determinado orden.